El alcalde provincial de Trujillo, Mario Reyna y el general de la Policía Nacional, Guillermo Llerena, supervisaron la incautación de los bienes a la discoteca Caracas, que operaba al margen de la ley, en la cuadra 5, del jirón Miguel Grau, en el Centro Histórico de Trujillo.
El centro nocturno fue clausurado en reiterados operativos por no contar con sus documentos de funcionamiento actualizados y por las continuas quejas de los vecinos por generar ruidos molestos, sin respetar las normas municipales, ni el límite de horario de funcionamiento, que es la una de la madrugada.
La Subgerencia de Operaciones de Fiscalización de la Municipalidad Provincial de Trujillo se encargó del operativo inopinado que culminó con la incautación de bienes de la discoteca Caracas.
Las cosas quedaron en poder de la entidad edil y solo serán devueltas con la demostración de acreditación de su propiedad, a través de la presentación de factura y boletas de pago, tras el cumplimiento de las multas impuestas por la municipalidad.
Estas acciones de control, buscan también transparentar el origen de los fondos que financian estas actividades ilegales de diversión nocturna, que generan perturbación en los vecindarios de la ciudad.
El alcalde Trujillo, Mario Reyna señaló que por varias décadas se ha dejado a los dueños de las discotecas a hacer los que las ganas se les da, ya que trabajaban sin licencias de funcionamiento, pero ahora se ha establecido parámetros para respetar la tranquilidad de los vecinos.
“Debemos ser buenos ciudadanos porque la Ley se respeta, si queremos que nos respeten y el orden en la ciudad no se negocia”, precisó.