La región La Libertad dejará de recibir 215 millones de soles por concepto de canon minero debido a la evasión tributaria proveniente de la minería ilegal e informal, según estimaciones del Ministerio de Energía y Minas. Ese dinero serviría para hacer obras que beneficien a sus habitantes. Otras regiones donde hay actividad minera ilícita, como Puno, Arequipa y Madre de Dios, también sufrirán esas pérdidas.
Puno dejará de recibir 460 millones de soles; Arequipa, 450 millones; Madre de Dios, 240 millones; Ayacucho, 160 millones.
En 2025, la minería ilegal e informal generará pérdidas al Estado peruano por 5.200 millones de soles en la recaudación del impuesto a la renta (IR). El 50 % de ese impuesto se convierte en canon minero, que se entrega a los gobiernos regionales y locales. Es decir, 2.600 millones de soles.
Entonces, en las regiones donde hay presencia de mineros que extraen minerales y no pagan impuestos, no recibirán canon. Con los 215 millones de soles que La Libertad dejará de percibir se podrían construir tres colegios emblemáticos o una treintena de colegios rurales, un hospital nivel II-2 y aún quedaría presupuesto disponible para otras obras más pequeñas.
“Todas estas regiones se ven afectadas en su recaudación tributaria, lo que impide el desarrollo, destruye el medio ambiente y genera inseguridad ciudadana”, dijo el ministro de Energía y Minas, Jorge Luis Montero.
No es el único problema. En el gobierno han detectado que, en la mayoría de este tipo de actividades, se vulneran los derechos laborales de los trabajadores. Los dueños de las minas contratan personas para cavar socavones y extraer minerales; a estos trabajadores, aunque se les pagan sus sueldos, no se les otorgan vacaciones, ni seguro social, ni compensación por tiempo de servicios, ni se realizan aportes al sistema de pensiones. Tampoco cuentan con seguro de vida, por lo que, cuando ocurre un accidente y muere un minero, se realizan acuerdos extralegales para evitar sanciones penales.
Se van a revisar las normas sobre derechos laborales de los pequeños mineros, de los trabajadores de la pequeña minería y la minería artesanal, para que puedan realmente trabajar con salud y seguridad ocupacional, y no vuelvan a ser manipulados por personas que dicen que los defienden, pero que solamente los explotan y los exponen”, dijo el ministro.