Continuidad. La primera promesa que cumplió Rafael López Aliaga como alcalde de Lima es materializar el recuerdo del exburgomaestre Luis Castañeda Lossio. De momento, son cuatro los funcionarios reusados por quien debe S/35 959 695 a la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat): Abdul Miranda, José Justiniano Martínez, José Danós Ordoñez y Óscar Lozán Muyo. Los primeros tres regresan a la comuna en los mismos puestos que ejercieron con el fallecido líder de Solidaridad Nacional.
Esta ratificación de intenciones acontece durante los primeros días de López Aliaga al mando de la ciudad capitalina, después de que la Fiscalía concluyera que “registra presuntos ingresos (…) de operaciones inusuales” en el marco de la investigación preparatoria seguida en su contra por el presunto ilícito de lavado de activos. La hipótesis del Ministerio Público es que el actual alcalde favoreció a dos de sus empresas durante los años de la exalcaldesa que demonizó durante toda su campaña, la indagada Susana Villarán.
JOSÉ DANOS ORDOÑEZ
El ex candidato presidencial —que tuvo como eslogan la lucha contra la corrupción— nombró como secretario general del Concejo de la Municipalidad Metropolitana de Lima a José Danós Ordoñez. El funcionario estuvo implicado en el caso Comunicore por presunta colusión y pudo librarse de la responsabilidad con el fallo de la comisión liderada por su esposa, la fujimorista Patricia Juárez. Ahora se desempeñará en el mismo cargo que tenía con Castañeda Lossio.
Esta corruptela fue alertada por la Contraloría y consistió en que Comunicore compró una deuda que Relima tenía con la Municipalidad de Lima desde 1998. En un principió se pagó 14,6 millones de soles, pero hubo una segunda operación tramitada por la comuna de Lima de 35,9 millones de soles.
JOSÉ JUSTINIANO MARTINEZ
RLA también designaría como gerente de infraestructura vial de la Empresa Municipal Administradora de Peaje (Emape) a José Justiniano Martínez, recordado por decir que el derrumbado puente solidaridad, unión entre San Juan de Lurigancho y El Agustino, “solo se había desplomado”. Según publicó Udeal, el ingeniero civil no está colegiado.
